UN PARAÍSO NATURAL

JARDÍN BORDA

El Jardín Borda es un lugar apacible rodeado de naturaleza que invita a tranquilizar el alma y la mente, este bello lugar se encuentra ubicado en la ciudad de Cuernavaca Morelos. 

El Jardín Borda debe su nombre a José de la Borda constructor de este paraíso natural, cuyo fin fue ser la casa de verano del emperador Maximiliano de Hasburgo, José de la Borda conjunto la magia de la naturaleza de una gran variedad de plantas, con la arquitectura de lugar creando así el esplendor y la calidez que el emperador y su esposa Carlota requerían para escapar de la agitada vida diaria que llevaban y ese momento y ahora ese paraíso está a nuestro alcance ya que se encuentra abierto a todo el público para que podamos disfrutar de esa magia que el lugar encierra.  

Este hermoso y maravilloso lugar cuenta con diversas plantas ornamentales y frutales que deleitan la vista con sus múltiples colores y aromas conjuntándose en perfecta armonía con la refrescante agua que brota alegremente de las elegantes fuentes que adornan cada uno de los jardines que conforman este paraíso. 
Al caminar por los diferentes corredores que nos llevan de una sección a otra del jardín es maravilloso, ya que a cada paso nos encontramos con espacios majestuosos en si mismos, podemos ver una palma de coquito, una jacarandá, un tulipán, una noche buena, un mango,una ciruela, deleitarnos con sus colores aromas y texturas y escuchar su vaivén al mecerse con el viento.

Algunas plantas son nativas del lugar y otras introducidas como plantas exóticas pero que en conjunto nos transportan a un lugar inigualable. También se puede convivir con la fauna propia del lugar como lagartijas, ardillas, aves que residen ahí y otras que migran amenizando el lugar con alegres cantos, también se pueden observar tortolitas, pericos, búhos, golondrinas, colibríes. 

Al centro del jardín se encuentra el lago en el cual se zambullen alegremente patos y gansos compartiendo el hábitat con peces y plantas acuáticas que dan  al lago una belleza única, y a que aunque este hermoso lugar se encuentra dentro de la ciudad de la eterna primavera, como es conocido Cuernavaca, al estar dentro del Jardín parece que estamos alejados de la ciudad y solo se escucha el cantar de los pájaros y el burbujear del agua al caer, se siente la suave brisa acariciando las mejillas dando una paz interior inimaginable.